Aunque muchas personas han encontrado en el teletrabajo un aliado para la mejora de la conciliación familiar, la falta de contacto personal y la sensación de aislamiento han llevado a empresas y empleados a plantearse el regreso a las oficinas.
Las primeras en hacerlo fueron las grandes tecnológicas. Google, Apple o Amazon, que enviaron a sus trabajadores a casa al inicio de los confinamientos en 2020, han comprobado que la presencialidad sigue siendo la mejor fórmula para favorecer la colaboración, el sentimiento de equipo y la generación de ideas.
Entonces, ¿se acabó el teletrabajo? Nada más lejos de la realidad. Compañías de todo el mundo están optando por modelos híbridos que permiten teletrabajar varios días a la semana. Spotify, por ejemplo, deja que los empleados decidan cuántos días prefieren quedarse en casa. Otras, como Salesforce, han implantado tres modelos: flex, totalmente online y totalmente presencial.
El coworking como alternativa a la oficina tradicional
Este regreso parcial a las oficinas ha evidenciado las deficiencias de muchas de ellas: espacios excesivamente abiertos o demasiado compartimentados, escasa luz natural, carencia de lugares de esparcimiento, ubicaciones aisladas, excesiva dependencia del vehículo privado…
A esto hay que añadir un nuevo problema: ¿qué hacer con todos esos puestos de trabajo que quedan desocupados tras la implementación del teletrabajo? Mudarse a un despacho más pequeño puede ser una opción pero, ¿y si el equipo crece?
Estas cuestiones han animado a muchas compañías a apostar por el coworking, una solución que les permite disponer de despachos privados o compartidos, la opción de adaptar el espacio a sus necesidades conforme éstas van cambiando y, sobre todo, la posibilidad para sus empleados de conectar con otras personas y salir del aislamiento social que muchas veces provoca el teletrabajo.
Es la opción elegida por Open Bank, que ubicará en el coworking WayCO Abastos su equipo de desarrollo en Valencia, que trabajará conjuntamente con el de Madrid combinando un modelo híbrido de teletrabajo y presencialidad.
Diseño de espacios de trabajo a medida
Sin embargo, para algunas compañías, que necesitan acomodar a sus empleados en espacios exclusivos y que buscan la máxima personalización, la solución pasa por el diseño de oficinas a medida, ya sea redefiniendo las plantas de sus edificios hacia un modelo más colaborativo e inspirador, o buscando nuevas localizaciones.
Salesforce, por ejemplo, está rediseñando sus sedes en todo el mundo pensando en un estilo de trabajo más flexible a partir de la idea de “community hubs”, creando más zonas para la colaboración y el esparcimiento que favorezcan la conexión entre las personas. “We’ve learned that 80% of our employees are hungry for the connection, camaraderie and innovation that come from gathering in-person“, afirman en su blog.
También el Campus Repsol en Madrid, sede central de la compañía, ha evolucionado desde el tradicional bloque de edificios a un modelo “híbrido”. Tal y como cuentan en este reportaje, están orientado los puestos de trabajo presenciales hacia “nuevos espacios de colaboración y concentración”.
Otro caso es el de la empresa alemana Maibornwolff, que cuenta con parte de su equipo ubicado en Valencia. Después de trabajar durante unos meses en la zona de coworking de WayCO Ruzafa, necesitaban un amplio despacho privado para ubicar a un equipo en plena expansión. La solución llegó en forma de oficina independiente en una ubicación muy próxima al centro de coworking en Ruzafa, un diseño a medida que les garantiza la máxima privacidad sin renunciar a las ventajas de pertenecer a un coworking.
Ya sea de forma compartida o privada, las empresas están orientando sus sitios de trabajo hacia usos colaborativos. La oficina ya no es ese lugar al que acudir a calentar una silla, sino un espacio donde conectar y crear comunidad.