Con una excelente iluminación procedente del exterior y un colorido mobiliario que invita al dinamismo, la sala Segrelles se ha convertido en la favorita de todo tipo de público.
Las sesiones de brainstorming, las presentaciones de producto y las juntas de vecinos adquieren en ella un cariz animado y positivo.
Mención especial merece la puerta decorativa de madera, perteneciente a lo que antaño fue una fábrica de hilos de oro y plata.